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Orientación Laboral: Retos, tendencias y soluciones digitales
Las administraciones y entidades de empleo se enfrentan a diversos retos en los próximos años a causa del cambio de paradigma laboral que trajo aparejada la pandemia y la velocidad con la que las nuevas tecnologías están transformando el mundo laboral. En este contexto, tanto los profesionales como las organizaciones dedicadas a la empleabilidad necesitan implementar metodologías innovadoras de orientación que puedan cubrir con éxito la creciente demanda de personas en desempleo.
Para abordar en profundidad estos retos y desafíos en la empleabilidad, conversamos con Xose Alberte Cea, orientador laboral que lleva más de veinte años ayudando a las personas a desarrollar sus capacidades profesionales y a las empresas en la gestión del talento ¿Qué nos contó? ¡Lo vemos a continuación!
El empleo ya no es un espacio ni un listado fijo de tareas
La temporalidad, el teletrabajo, la externalización de servicios, por ejemplo, son algunas de las tendencias 2022 en la empleabilidad que se avizoran en España. Al respecto, Xosé considera que ya “hemos superado esos primeros pasos que nos llevan a un cambio en el concepto de trabajo que manejábamos desde el industrialismo y que acabará por completarse con la implementación del trabajo en la nube (múltiples nubes)”. Aunque insiste en que estos cambios no afectan por igual a todos los trabajos y que la velocidad de adopción cambia dependiendo de muchos factores, “el empleo ya no es sincrónico, ni es un lugar al que acudir, ni un listado fijo y permanente de tareas”.
Adaptación y autonomía, competencias transversales claves para el 2022
En este contexto de inestabilidad ¿Qué competencias transversales tienen más peso en los procesos de reclutamiento actuales? Nuestro entrevistado destaca principalmente la adaptación como prioridad para los procesos de selección: “En mi modesta experiencia creo que es así, las empresas empiezan a valorar en sus procesos de selección esa competencia, junto a otras como la comunicación o la capacidad de trabajar autónomamente durante un proceso (lo que no quiere decir que no se trabaje en el marco de un equipo)”.
No sin las competencias digitales
En este sentido, las competencias digitales resultan claves. Pero Xosé insiste en que no solo lo son en el ejercicio profesional, sino también en la búsqueda active de empleo: “A veces, cuando comento esto, muchas personas piensan que es una cuestión que solamente afecta a determinados puestos. Y no es así. Los procesos de selección se han digitalizado y hoy en día no contar con competencias digitales mínimas te resta muchísimas opciones”, sostiene. Estas competencias, asegura, atraviesan acciones que van desde el envío del CV digital, las redes sociales, la cumplimentación de cuestionarios online, y hasta las mismas entrevistas por videollamada: “Quien no cuenta con las competencias para hacerlo, se queda fuera”.
Entidades de empleabilidad ante el crecimiento exponencial de la demanda de trabajo
Ante el crecimiento exponencial de la demanda de empleo, conversamos con Xosé acerca de cómo están respondiendo las entidades que fomentan la empleabilidad, tanto las administraciones públicas como las organizaciones del tercer sector, esto nos contó: “La administración pública está haciendo grandes esfuerzos por adaptarse a esa demanda en las cuestiones más macro, como el diseño de programas, la modernización de la carta de servicios, la implementación de tecnología, entre otras. Pero seguimos sin contar con una respuesta adecuada en lo micro. El papel de la orientación laboral hoy en día o el de personas en labores de intermediación son claramente insuficientes. Lo mismo sucede con la formación que a pesar de los cambios, sigue sin llegar a quienes más lo necesitan de forma rápida, ágil, efectiva y permanente”.
En cuanto a las entidades del tercer sector, nuestro entrevistado destaca “que van creciendo de forma muy rápida sin perder esa visión micro que les permite estar más cerca de las personas y también de las empresas, aprovechando, en muchos casos, aquellos lugares con demanda de trabajadores a los que no llega la administración”.
Metodologías innovadoras de orientación laboral
Implementar metodologías innovadoras y personalizadas de orientación laboral, que superen el enfoque burocrático de las oficinas de empleo, es uno de los grandes retos de la actualidad. Conversamos al respecto con Xosé, quien sostiene que “concretamente el Gobierno ha puesto en marcha medidas muy interesantes (como la creación del Centro de Orientación, Emprendimiento e Innovación para el Empleo). Pero tardan en concretarse y en producir cambios reales y efectivos en los servicios de empleo y específicamente en la orientación que podemos encontrar en el Servicio Público de las comunidades autónomas o de ayuntamientos y otros organismos”.
En lo que refiere a las entidades del tercer sector, nuestro entrevistado considera que efectivamente están abanderando cambios metodológicos muy importantes: “Propuestas como las Lanzaderas de Empleo, o los proyectos de inserción en sitios en los que no hay relevo generacional, son ejemplos de buen hacer”.
Sin embargo, para Xosé seguimos teniendo entidades y profesionales que piensan que se puede seguir orientando sin la digitalización: “Más que promover innovaciones radicales, llegaría con actualizar competencias y adaptarse al entorno de la sociedad digital que nos ha tocado vivir”, considera.
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Los desafíos en la automatización y digitalización de procesos de orientación
Uno de los principales desafíos a los que se enfrentan está relacionado con la automatización y digitalización de los procesos de orientación y se trata de la puesta en marcha y la utilización de herramientas de perfilado: “Llevamos años con esta demanda y es hora de que los profesionales de orientación cuenten con herramientas de este tipo. Estas les permitirán ofrecer una respuesta más apropiada a cada persona, una respuesta basada en datos previos y contrastados. A mayores, obviamente, todos nos enfrentamos al desafío de la adaptación que mencionaba antes. Como cualquier profesión la digitalización acentúa el carácter de servicio frente a producto y obliga a utilizar nuevas herramientas que debemos incorporar al trabajo de orientación laboral”, argumenta Xosé.
Por qué mostrar lo que sabemos hacer
Finalmente, conversamos sobre lo imprescindible que son las herramientas digitales en la actualidad, tanto a la hora de emprender la búsqueda activa de empleo, como en la prospección e intermediación laboral. Todos estos son procesos de venta que generalmente se desarrollan de manera poco sistematizada y sin el seguimiento oportuno que permite disponer de más posibilidades de éxito.
Xosé considera que es imprescindible saber utilizar y manejarse con herramientas digitales, partiendo de la realización de “videoentrevistas, saber utilizar los portales de empleo o los apartados de Trabaje con nosotros de cualquier empresa. Incluso conocer mínimamente cómo funcionan los Applicant Tracking Systems (ATS).”
En estos procesos, además, resulta fundamental una herramienta 100% gratuita y que todos tenemos a nuestro alcance: LinkedIn. “Hablamos de una red profesional con 15 millones de perfiles en España. Con esas cifras, ¿De verdad hay alguien que piensa que no pierde oportunidades quedándose al margen de LinkedIn?”, se pregunta nuestro entrevistado.
Orientación a lo largo de la vida, un derecho de todas las personas
Para finalizar, preguntamos a Xosé sobre el panorama actual de los profesionales de orientación laboral en España y ha enfatizado en un concepto fundamental, el de la orientación a lo largo de la vida: “Debemos avanzar en concretar la orientación a lo largo de la vida. Hablamos de considerar la orientación como un derecho que las personas pueden reclamar a lo largo de toda su vida, con especial atención a aquellos momentos clave como son la elección de sus estudios, el paso al mercado laboral o el desarrollo profesional posterior”.
Y ya para cerrar nuestra entrevista, queremos destacar la reflexión final de nuestro entrevistado:
“Desde una perspectiva más concreta de los profesionales de orientación podríamos citar algunos retos importantes (trabajo con colectivos específicos, contribuir a la inclusión digital…) pero el que me parece más importante es el de superar la absoluta precariedad y temporalidad en la que trabajan. Programas de contratación anual, contrataciones esporádicas para acciones concretas, profesionales que ahora están y mañana no… Este es el triste escenario de nuestra orientación laboral que impide que las personas apuesten por desarrollarse profesionalmente en esta área y que tiene como consecuencia servicios poco especializados, centrados en objetivos inmediatos y que no aportan lo que podrían aportar al mercado, a las personas y a las empresas”.
La obligada gestión del cambio que trae consigo la innovación tecnológica y sus consecuencias requiere que las organizaciones que fomentan la empleabilidad acepten el desafío de transformar su prestación de servicios de calidad y garantizar la supervivencia y rentabilidad.
*Conoce más sobre Xosé Alberte Cea.
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Por Ana Belén Jara
Digital Marketing Manager | neoCK
Me parecen interesantes las aportaciones de este señor. Pero creo que el análisis crítico del papel de los orientadores lo centra demasiado en la Administración. Soy orientador de un Servicio Público de Empleo y conocemos de primera mano las carencias y deficiencias de nuestro servicio: burocratización (porque no sólo se hace orientación dado lo escaso del personal) y demás. No obstante obvia Xosé Alberte que una manera de corregir esas deficiencias sería recuperar competencias para lo público potenciando esos servicios y no externalizandolas y privatizandolas a entidades privadas “colaboradoras” donde existe el mismo nivel de burocratización, abunda la falta de profesionalidad y sobra el exceso de ansia pecuniaria. Se cobra por persona atendida y no por resultados obtenidos, luego prima la cantidad y premura en la atención. La apuesta debe ser por potenciar los Servicios Públicos de Empleo aumentando enormemente su plantilla que debe pasar por procesos selectivos rigurosos. Hay que digitalizar más sus servicios y enlazarlos con el sistema educativo para hacer posible aquello de la orientación para el proyecto profesional a lo largo de toda la vida. Igualmente hay que ir cerrando el grifo a esa pléyade de entidades “colaboradoras” que no hacen sino dividir el trabajo y parasitar los tan necesarios fondos públicos.
Hola Tarso.
Gracias por tu reflexión. Nadie mejor para contribuir al debate que los profesionales que estáis día a día en organizaciones públicas y privadas cerca de estas realidades.
Yo también soy de la opinión de que muchas de las iniciativas que se subcontratan desde los Servicios Públicos, podrían ser asumidas por el personal de los mismos. No obstante, siempre que he hablado con diferentes Direcciones Generales de Empleo de diversas regiones, me han trasladado la complejidad para hacerlo, principalmente por la escasez de personal.
Cuando yo he trabajado en programas de empleo en entidades sociales, en muchas ocasiones los dos indicadores que se han utilizado para establecer el total de la subvención han sido el de número de participantes y número de inserciones laborales con unas determinadas características (esto no es siempre así, claro). Tampoco soy partidaria de tomar como referencia sólo los indicadores de inserción a la hora de valorar la efectividad de los programas. Existen otros resultados que son muy importantes, relacionados con: la activación o cambio de actitud con la que se afronta la búsqueda activa de empleo y la mejora profesional (formación, cambio de hábitos, etc) y el desarrollo de soft skills (que rara vez se mide en los programas). Por eso, y por la necesidad de aprovechar la parte buena de la innovación tecnológica, desde neoCK, estamos muy comprometidos con el desarrollo de tecnologías sociales para medir y desarrollar competencias transversales.
También me parece totalmente acertada la visión de trazabilidad desde educación a empleo. Considero que los Servicios Públicos deben apoyar, de manera proactiva, la orientación vocacional y profesional en los centros educativos.
¿En qué Servicio Público trabajas tu?