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EL DESAFÍO…
El mercado de trabajo evoluciona a un ritmo vertiginoso, marcado, en parte, por el desarrollo tecnológico. Comprender el nuevo paradigma laboral, las nuevas reglas del juego y actuar en consecuencia supone un desafío para la ciudadanía.
Muchas organizaciones, públicas y privadas, nos dedicamos a favorecer el desarrollo de la empleabilidad. Para ello, convertimos las necesidades de las personas en nuestros propios retos y las acompañamos en el proceso.
El Servicio Público de Empleo Estatal es el actor público más destacado al respecto. Como no puede ser de otra manera, los/as profesionales que lo integran son conscientes de este complejo desafío, que se torna a nivel general (la necesidad de reciclaje, el desarrollo de competencias digitales…) y a nivel particular (la inclusión de personas con diversidad funcional, la discriminación basada en sexo, edad, etc).
LOS “COES”: UNA RESPUESTA ANTE EL DESAFÍO…
Una de sus grandes apuestas para dar respuesta a estas necesidades es la creación de la Red de Centros Públicos de Orientación, Emprendimiento, Acompañamiento e Innovación (denominados coloquialmente “COES”).
Esta red tiene la vocación de convertirse en un espacio compartido del Sistema Nacional de Empleo para la innovación y experimentación en materia de orientación y emprendimiento para el empleo. Un total de 20 centros pondrán en marcha diversas actuaciones a través de sus planes de trabajo, promoviendo el intercambio mediante el trabajo en red (como su propio nombre establece).
¿SERÁ LA SOLUCIÓN?
Los Servicios Públicos de Empleo regionales afrontan el reto de idear cómo será su centro tomando como referencia un protocolo común. En realidad, el gran reto no es sólo modelizar los COES, sino conseguir que realmente cumplan con su propósito de manera exitosa y no se queden en una iniciativa bienintencionada que no obtenga los resultados esperados.
Teniendo en cuenta el propósito de estos centros, promover la innovación para resolver las necesidades sociales en materia de empleabilidad, es inevitable establecer el paralelismo con las iniciativas de intraemprendimiento e innovación abierta, más consolidadas (aunque no solo) en la empresa privada.
La innovación abierta es la apuesta por la innovación, no sólo desde unidades de la propia organización, sino también en sus límites. Es importante la participación de actores externos a la organización, generando “match” en los que todas las partes se enriquecen en el proceso.
El intraemprendimiento es la adopción de la cultura, marcos y técnicas de trabajo de las startups (creatividad, agilidad, mejora continua…) en las unidades de innovación de una organización.
Teniendo en cuenta que en el equipo de profesionales que conformamos neoCK aunamos expertise sobre las organizaciones públicas y privadas implicadas en la orientación e intermediación laboral, y también sobre la creación, consolidación y transformación de organizaciones, identificamos muchísimas claves para transferir a las primeras el conocimiento generado en las segundas en materia de modelos de promoción de la innovación.
A continuación, identificamos las 3 PRINCIPALES LÍNEAS CLAVES que pueden FACILITAR A LOS COES la consecución de sus objetivos:
1.- Las instalaciones:
Integrar el planteamiento de dos tipos de espacios: el espacio físico, considerando su importancia para cuidar la ergonomía y favorecer la interacción y la creatividad, y el espacio digital, facilitando su accesibilidad, que se han hecho más patentes tras la llegada de la pandemia.
Ambos espacios tienen una influencia determinante en cuestiones más tangibles (como el tipo de actividades internas y externas que se pueden realizar), e intangibles (como las emociones y estados de ánimo que despiertan en quienes lo utilizan).
2.- Cultura, estructura y equipo de trabajo:
La promoción de la innovación es indisociable de marcos de trabajo afines a la autogestión, el liderazgo participativo o el agile.
Su interiorización por parte de los equipos de trabajo precisa de una selección de personal basada no solo en competencias técnicas, sino también en valores y soft skills (en la medida que las limitaciones normativas lo permitan).
También precisa de una capacitación para dichos equipos de trabajo, que les permita ir adquiriendo un nuevo mindset en el que el foco no está puesto (o no está solo puesto) en procedimientos burocráticos. Así, también conocerán y dominarán técnicas y herramientas de trabajo de cocreativas: design thinking, service design, eventos como hackatones y dinamización de comunidades virtuales.
Tanto en la identificación de necesidades como en la generación de soluciones (dos grandes “patas” de la innovación), es deseable la generación de espacios participativos en los que intervengan diversos actores: estudiantes, personas en desempleo, emprendedoras, entidades sociales, empresas, profesionales de los Servicios de Empleo y otras administraciones… Y es que las estructuras que se conformen, deben contar con unidades de trabajo dirigidas a identificar buenas prácticas (observatorios) y unidades dirigidas a articular espacios participativos para diseñar esas prácticas desde diferentes ópticas.
3.- Actividades:
Desde neoCK consideramos que dos actividades clave deben ser la experimentación de programas identificados como buenas prácticas en otros contextos (con la adaptación a la idiosincrasia regional) y también el testeo de iniciativas propias ideadas en los citados espacios de co-creación.
En ese sentido, conviene tener en cuenta la importancia del aprovechamiento de la tecnología a favor de los objetivos de estos programas. La tecnología aporta beneficios que son indispensables teniendo en cuenta las altas ratios de personas atendidas por cada orientador/a e intermediador/a. Algunos ejemplos claros son la automatización de parte de los procesos de intervención, la obtención de datos para medir el éxito de las mismas, y la atracción del público objetivo más joven.
Estas claves son las que el equipo profesional de neoCK consideramos básicas para que los Servicios Públicos de Empleo emprendan su transformación. ¿Qué otras claves se te ocurren?